Para los más atrevidos buena oportunidad para quitar las telarañas al chubasquero, para las nenazas que no se atreven a salir momento de volverse con el rabo entre las piernas.
Primeros kilómetros con inquietud temiendo encontrar el camino embarrado, con la primera subida nadie se acuerda de si llueve y desaparece la preocupación, el firme se encuentra bien no hay barro y el recorrido esta gustando, encinas, robles, curvas, antiguas carboneras, más curvas un poco de asfalto para manejar las coronas pequeñas y tirando hacia arriba un empellón final con pique en la entrada de Fuentecambrón.
Al cruzar la N110 como si de un cambio de universo se tratara el grupo se enzarza en un combate con un inoportuno chaparrón con ganas de mojar que aunque breve parece no acabar. El agua da paso al sol y la bajada a la subida al pinar que de nuevo es aprovechada para medir fuerzas, delante en Atauta aguardan las autoridades, viñas, lagares, las bodegas y el almuerzo en una de ellas con jamón y porrón.
LAS FOTOS AQUÍ
Por el valle hasta cruzar el río Pedro y armar un poco de alboroto por las calles de Peñalba para encarar con buen pie la la subida por un sinuoso barranco alineados, el sol calentando el lomo, la ropa que estorbaa, el almuerzo dando guerra en las tripas, los piñones que se acaban y la cuesta que continua............................
al finalizar un buen pero cuidadoso manguerazo a la bici, quitarse la ropa de faena hacer una visita al bar y los compañeros nos tiene preparado el rancho.
