¡Pi,Pi,Pi,Pi,! el despertador toca diana media hora más tarde que los otros domingos, el suelo indica que ha llovido algo, el cielo sugiere que lloverá más. Unos por una calle otros por otra, otro por abajo con las bicis bien lustrosas nos agrupamos en el punto de salida confiando en que la lluvia no nos acompañe.
Resuelto la duda de si rumbo norte o dirección sur, por donde menos barro haya, por las hermanitas hasta Sotos y luego a la loma, pero en Sotos se preparan para una batida por ese lugar y hay que cambiar el diseño de la ruta. Hacia Valdemaluque y "parriba" el frío del cuerpo ya desaparece, después de unos kilómetros se percibe extraña sensación, estamos en la galianita pero la estamos bajando! raro, raro, raro. Ahora se nos ha unido una ligera llovizna y enfilamos otro camino en busca del cortafuegos, un cacho de piedrecillas y toboganes y giro a la izquierda, camino cortado toca saltar, por el pastizal abajo esquivamos unas vacas tozudas no quieren dejarnos pasar, nueva cerca y un breve paso por el olvidado Velasco,
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La lluvia sigue con nosotros, escendemos otro poco hasta tropezar otra vez con el querido cortafuegos, grava, sube, baja, lluvia, un desvío a la izquierda para observar la tala de la leña quemada y de nuevo al tema cortafuegos. Al final bajada por un sendero entre pinos paso bajo la autovía y mojaditos como estamos hay tiempo para un piscolabis.
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